En el cambiante mundo de la moda, donde las temporadas vienen y van con rapidez, siempre surge una pregunta: ¿Qué sucede con la ropa que no se vende? Para las grandes cadenas de moda como el grupo Inditex, propietaria de marcas tan conocidas como son Zara, Massimo Dutti, Pull & Bear y Bershka, este es un desafío constante. Sin embargo, la estrategia de Inditex para manejar aquella ropa que no venden es tanto práctica como socialmente consciente.
📌 Índice de contenido
Los propios outlets de Inditex
El primer destino de las prendas que no logran encontrar un nuevo hogar en las tiendas regulares de Inditex son sus outlets. Estos establecimientos repartidos por todo el país venden productos de temporadas pasadas a precios más bajos, ofreciendo a sus clientes la oportunidad de comprar ropa de calidad a un buen precio.
Es una manera eficiente y rentable para la empresa de moda de reducir su inventario y al mismo tiempo, ofrecer a sus clientes la oportunidad de conseguir gangas.
Donaciones a ONGs
En caso de que algunas prendas no logren venderse incluso en los outlets, el grupo empresarial de moda sigue la política de donar a organizaciones no gubernamentales.
Esta iniciativa tiene un doble beneficio: por un lado, ayuda a la empresa a mantener su stock eficiente, evitando que se acumule en su inventario. Por otro lado, permite a la empresa contribuir a la sociedad, proporcionando ropa a aquellos que más la necesitan.
Prendas en mal estado
Lamentablemente, no todas mantienen en buen estado. Aquellas que se encuentran en mal estado o que no cumplen con los estándares de calidad que marca la propia Inditex son desechadas de manera responsable, en línea con las políticas de gestión de residuos y reciclaje de la empresa.
El mercadillo de arteixo
Una práctica menos conocida y que conocimos hace unos días, pero igualmente interesante, es el mercadillo que la empresa organiza en Arteixo, Galicia, la sede de Inditex. Según una ex empleada que lo compartió en redes sociales, los trabajadores de la empresa tienen la oportunidad de adquirir esta ropa a precios entre 1 a 5 euros. Esta es una excelente forma de reconocer y recompensar el trabajo de sus empleados, permitiéndoles disfrutar de los productos de la propia empresa.
