Durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918), el trench coat fue creado para abrigar a los soldados británicos en los campos de batalla. Esta prenda se diseñó para ser resistente al viento, la lluvia y la nieve, algo que resultó muy útil para los militares en los campos de batalla.
Estos abrigos eran estrechos y ligeros, y estaban fabricados con tela impermeable, lo que les permitía a los soldados mantenerse secos.
Tenía una función muy práctica en la Primera Guerra Mundial, pero se convirtió en algo más que un simple abrigo, una prenda básica. Con el tiempo se volvió una moda icono.
Fue evolucionando con el tiempo y paso a ser más delgados, más cortos y con más detalles. Estas prendas se hicieron populares entre la aristocracia y la clase media alta, donde se utilizaban como una prenda de vestir.
Con el tiempo, el trench coat se convirtió en una prenda básica para la mayoría de los armarios. La razón por la cual se volvió tan popular fue por su versatilidad. Se podía llevar en una variedad de situaciones, desde una reunión de negocios hasta una noche en el teatro.
El trench coat también se volvió una prenda básica debido a su estética clásica. El estilo sencillo y elegante lo ha hecho que sea una prenda atemporal. Esto significa que se puede llevar año tras año sin pasar de moda. Además, se ha vuelto más accesible debido a la amplia variedad de estilos disponibles.
Hoy en día hay una variedad de opciones de colores, estilos y tamaños para elegir. Esto hace que sea mucho más fácil para la gente encontrar el trench coat perfecto para ellos.